Si me seguís por twitter ya sabéis que en 12h deshice la maleta de Budapest (tengo más cosas pendientes que contaros pero lo haré poco a poco) y preparé la maleta para un finde de desconexión. Soy fácilmente convencible en cuanto a los viajes incluso cuando los planes no son del todo a mi gusto a priori. Pero había que sacarse la espinita del viaje de verano.
El viernes nos juntamos con amigos que ya estaban allí. Íbamos a pasar el puente en una casa de un familiar por lo que el alojamiento fue de lo más económico . Una buena compra en Mercadona con todo lo necesario y tras 2,5h de viaje en carretera, llegábamos a Jaca.
El plan del viernes era dar una vuelta y tomar unas cañas (algo que se nos da muy bien). La primera caña cayó en 'La tasca de Ana', un bar muy conocido en el que degustamos una tapa de marisco rebozado con una salsa que estaba para chuparse los dedos denominado 'Rodolfito'. La segunda caña la tomamos en el también conocido 'Gorbea'.
La Tasca de Ana |
El sábado por la mañana fuimos al monte. Tranquilos, monte de dificultad infantil apto para mí . Decidimos ir a 'Aguas tuertas' y si nos convencía, llegar hasta el 'Ibón de Estanés'. El recorrido es largo pero bastante llano salvo la primera y la última subida. Pero gran parte del recorrido es en llano por el valle. Impresiona el paisaje y pasar entre vacas y caballos pastando. En total necesitamos unas 6h para ir, comer y volver. Si vais, llevad ropa de abrigo porque suele haber un viento frío bastante molesto.
Ibón de Estanés |
Por la tarde, para recuperar fuerzas, no podíamos hacer otra cosa que una ronda de tapas . Ya os he dicho que se nos da muy bien. Primero estuvimos en la terraza interior de 'La Lola'. Muy agradable el lugar y perfecto para estar sentado a la fresca. Después, repetimos en el 'Gorbea' esta vez con un timbal con cama de patata, pato y yema de huevo con pimentón. Delicioso es poco.
Carta de 'La Lola' y tapa del 'Orbea' |
Ese día descansamos que dio gusto. El problema vino por la mañana cuando sonó el despertador. Habíamos quedado a las 10.30 y llegábamos tarde. Tras cargar el coche cual gitanillos, son fuimos hasta Murillo de Gállego. Esta vez, dejábamos el monte para adentrarnos en el río y hacer rafting.
Algunos ya habían probado alguna vez esta actividad. Otros éramos novatos. Lo habíamos contratado con la empresa Alcocer (te aplican un 10% de descuento si repites con ellos) y nuestro monitor fue Marc. También tenéis la opción de contratar un reportaje fotográfico que realizan en la primera parte del recorrido. El precio era 35€ y como éramos 5, nos gustó la idea de tener un recuerdo del día.
Alcocer |
Yo soy mucho de agua pero el tema de las rocas me daba un poco de mal rollo, la verdad. Tras las primeras instrucciones, tocaba practicar en el agua como equipo. Superada la fase de contacto ya nos adentramos en los rápidos y con ello...llegó la primera caída. La actividad se alargó durante 3h y no puedo tener mejor recuerdo. Risas que nos han hecho tener dolor en los abdominales. La verdad es que es una actividad muy divertida para realizarla con amigos.
Rafting en el Gallego |
Comimos en un chiringuito al lado del parking ya que nos apetecía mucho estar en la terraza. Sin embargo, nos habían recomendado el menú en el albergue del pueblo y nos quedamos con las ganas, así que la próxima vez, lo probaremos.
Después de comer y antes de volver a casa, nos acercamos a Riglos para ver de cerca los mallos. Impresionante.
Los Mallos de Riglos |